Acerca de
Rayén Díaz
Año de Nacimiento: 1988Género: No binarie
Yo creo que por una weá de reivindicación política y porque quizá es el escenario donde estoy más cercano, me asumo como trans femenina, pero ... Ahora me causa más indiferencia el pronombre con el que se me trate, siempre y cuando se respete mi nombre.
¿Quién soy?
«Es un hombre», dijo el médico.
Y posteriormente me pusieron un nombre y un número.
1 6 7 4 8 3 7 4 7
¿Quién chucha soy?
«Eres mujercita», me dijeron los chicos que me golpeaban
luego de verme llorar
¿Quién soy?
¿Quién chucha soy?
¿Quién conchetumadre soy?
Un hombre, porque tiene pene pero se comporta como mujer.
¿Soy un hombre? No.
No me parezco en nada a ellos, no soy ni la mitad de lo que
son ellos.
¿Soy una mujer?
«¿Cómo vas a ser una mujer si hablas como hombre?»
«¿Cómo vas a ser una mujer si tienes pene?»
«No haces ningún esfuerzo por verte como mujer»
«Naciste hombre y morirás como hombre»
«Eres tan poco femenina»
No me parezco en nada a ellas, no soy ni la mitad de lo que
son ellas.
Entonces, ¿quién soy?
No soy nada de lo que querían de mí.
No soy nada de lo que yo esperaba ser,
pero soy más y mucho más que todo eso.
Soy inexistente para quienes intentaron decirme quién era.
Soy una aberración para todo lo preestablecido.
Soy constantemente una versión mejorada de mí.
¿A quién chucha le importa quién soy?
Solo yo sé quién soy.
Ser colita en los 90 acá era una weá... terrible, claro. Fui muy enjuiciada por hacer weás que no eran para niños con pene. Incluso, se me criticaba de que yo llorara mucho porque era una persona muy llorona. Ahora estoy como volviendo a desarrollar porque… pero sí, solía llorar mucho. Y bueno, eso también me significó bullying en la básica.
Igual cuando niña alguna vez pensé "quizá me case a los 25," yo creo que porque estaba también toda la idealización de lo que era formar familia, porque actualmente no es algo que quiera hacer.
Pasaron cosas igual porque igual estuve ocho años estudiando y en el cuarto año me acuerdo que yo empecé a salir con otro chico. Y en algún momento, a raíz de una conversación familiar, prácticamente me sacaron del closet. Muy, muy preguntándome, así como "oye, ¿tú eres gay?" Pero fue... fue igual... fue tenso en la medida que, o sea yo tenía muy claro que tenía que decirlo, pero no esperaba que fuera en una situación de ese tipo.
El 2013 fue la primera vez que en algún momento se me pasó por la cabeza la idea de transitar. Pero cuando pasó esto igual fue un momento en el cual yo estaba igual como super bajoneada y ...igual lo medité porque pensé, ya, "¿voy a transitar porque realmente soy trans o va a salir de un momento de tristeza que era muy, muy esporádico?"
Dentro de todo, uno como usuario de la salud mental, igual tiene que tener la voluntad de hacer cosas y decidir. Y me acuerdo que estuve, estuve tomando las pastillas que tomé a los 17, pero como que esta vez fui responsable de las pastillas y por eso hizo efecto. Funcionaron. Y cuando todavía estaba en tratamiento, en algún momento me volvió a la cabeza la idea de vivir como trans y ahí fue como me pilló desprevenida porque yo estaba ...a diferencia de las otras dos veces muy, muy bien conmigo mismo.
